27 de diciembre de 2010

NCIS: El secreto de un éxito inesperado.



NCIS se proclamó durante la anterior temporada seriéfila como la ficción más vista de la televisión americana con una media de 19,4 millones de seguidores, una cifra astronómica para la fraccionada industria americana, sobrepasando en términos cuantitativos a ficciones tan populares y conocidas como The Mentalist o C.S.I que ocuparon el tercer y el cuarto lugar en un ranking que venía coronando esta última durante casi una década.

NCIS es el claro paradigma del éxito sin precedentes que puede tener una ficción creada para rellenar un hueco específico en la programación que va creciendo de forma exponencial hasta convertirse en un autentico fenómeno de masas, y aunque su gestación no fue casual, su historia y su progresión son dignas de tener en cuenta. 



Cuando se habla de NCIS pocas veces suele referirse a ella como un spin-off, pero así es, aunque su serie madre lleve fuera del aire desde hace un lustro. Su predecesora, JAG, fue un estreno de la NBC que no consiguió el favor del público durante su primera temporada y fue abruptamente cancelada tras haber emitido tan solo 21 episodios (dejando en el aire el 22) y quedando en una dudosa posición 79 en la tabla de audiencias americanas.  Todo parecía perdido pero el principal competidor de NBC en aquella época, CBS, resucitó la serie como un relleno para la mid-season, un relleno que resultó ser mucho más que eso, ya que consiguió emitir nueve temporadas más en la cadena del ojo, eso si, siempre con un éxito más bien moderado, aunque no por ello menos sólido.

Tras ocho temporadas, los responsables de la emisora decidieron dar la oportunidad a la serie de expandir su marca con el nacimiento de un spin-off que testarían en la misma serie madre. NCIS supo contentar a los productores de la CBS y consiguió el visto bueno para convertirse en serie regular.


Ya desde su primera temporada comenzó a marcar guarismos similares a los de JAG, pero la curva ascendente en cuanto a datos comenzó a mostrarse de forma temprana, siendo uno de los pocos ejemplos en los que una ficción ha ido aumentando sus datos según aumentaba el número de episodios emitidos en la TV en abierto, pasando de los 11, 84 millones en su primera temporada a 15,30 en la tercera, 17,89 en la sexta, o la inalcanzable media de 19,33 millones en la séptima temporada.

JAG finalizó su recorrido dos años después del estreno de NCIS, con una gran erosión de audiencia y tras diez temporadas, pero tras ver los buenos resultados del spin-off, los mandamases de la CBS decidieron seguir explotando el universo dramático de la saga con la creación de NCIS: Los Angeles, otro espectacular éxito que lleva “beneficiándose” del lead-in de su serie hermana durante casi dos temporadas y que se convirtió el año pasado en el mejor estreno de 2009, siendo además la segunda ficción más vista de la televisión, cerca, esta vez si, de The Mentalist y C.S.I.


Volviendo a hablar de NCIS cabe destacar que, en la actualidad, promedia su octava temporada con unos niveles de audiencia impropios de un drama, por muy procedimental que sea, al que no le afecta ni la fragmentación, ni el cansancio de los espectadores ni el abandono de sus estrellas más emblemáticas.

Lo más curioso, quizá, es que nos encontramos ante un producto que no cuenta con grandes estrellas, que no hace ruido mediático, que es difícilmente exportable por su temática y que consigue vertebrar la nueva noche fuerte de la televisión americana con una fuerza digna de estudio.

5 comentarios:

satrian dijo...

A mí me gusta NCIS sigo con ella, aunque las últimas temporadas han perdido mucho del encanto de las primeras.

Fon dijo...

Es de esas series que nunca me ha llamado. Y menos con todas las temporadas que tiene...perezón! Y NCSI:LA tampoco me llama para nada.

Atticus dijo...

Yo te digo lo mismo que fon, perezaca.
Pero desde luego, es una cosa realmente curiosa.

LiPooh dijo...

¡Qué buenos recuerdos me has traído con JAG! Me lo pasaba en grande, al igual que con NCSI, aunque me falta de ver las últimas al igual que la segunda de LA.

Lo curioso de esta serie es la audiencia que tiene en EEUU y que aquí es una de las más odiadas.

Saludicos.

OsKar108 dijo...

Es un caso la mar de curioso, sí. Yo no he seguido nunca ni Jag ni NCIS (mi madre si la siguió un tiempo), ni ahora NCIS Los Angeles, que no digo que sean ni mejores ni peores.

¡Saludos!