Como producto Love, la nueva apuesta indie de Netflix,
da el rendimiento que se espera de ella. Es una serie de Judd Apatow, con todas
las consecuencias que ello conlleva, sobre una pareja caucásica y bastante asentada
económicamente que acaba de estrenar la treintena y que se esfuerza más en
parecer que en realidad acaba de estrenar la veintena.
No nos encontramos ante una historia
rompedora ni llena de escándalos. Más bien llegaría a decir que suele ser
bastante blanda en ciertas ocasiones, y mucho más blanca de lo que consideraría
en una historia sobre treintañeros en Los Ángeles. Él es un tipo muy feo con
una nariz prominente que está buscando su lugar en el mundo y que cuenta con un
trabajo que le permite vivir bien pero que no le satisface, mientras que ella
es una chica con pocos complejos y pasada de rosca que vive bien y tiene un
buen trabajo pero que, al moverse por impulsos, es incapaz de poner freno a sus
instintos, ya sean sexuales, con el alcohol o las relaciones de amistad.