En 1998, la extinta TheWB se encontraba en un momento decisivo para su parrilla y su programación. Tras la aparición de 7Th Heaven, Buffy y Dawson’s Creek estaba ante el año decisivo de consolación y necesitaba éxitos para distanciarse de su próxima rival UPN, por lo que encargó dos pilotos que acapararon sobremanera la atención de los espectadores, por una parte Felicity, la primera gran oportunidad para J.J Abrams, y por otra Charmed, una producción del rey midas Aaron Spelling. Ambas estaban destinadas a un público más adulto que sus compañeras de parrilla, buscando como target prioritario el de las mujeres y creando junto a Buffy una tendencia creciente en dramas protagonizados por mujeres fuertes e independientes, algo que aunque parezca mentira, era complicado hace 12 temporadas.
Pronto Charmed se convertiría en un éxito de audiencias gracias a la particular mezcla de géneros que aportó un toque de aire fresco a la parrilla de su emisora y reforzó su apuesta por lo sobrenatural salpicado de pinceladas en los diferentes géneros que triunfaban en otras series como el amor y los valores familiares, refrendando su apuesta por este esquema en Angel y Smallville.
Charmed triunfó durante 8 temporadas en la complicada parrilla de una TheWB que viró su esencia infinidad de ocasiones durante sus 11 temporadas en emisión, y es su historia detrás de las cámaras una de las más complejas de la TV.
1ª Temporada.
Tras anunciar que Aaron Spelling volvía a trabajar con Shannen Doherty la prensa enloqueció, dado las circunstancias en las que la diva había abandonado 4 años antes Beverlly Hills 90210, el morbo era evidente y el estreno del piloto congregó a 7,7 millones de seguidores, la mayor audiencia acumulada por un estreno en la historia de la cadena, contra todo pronostico, ya que TheWB nunca pensó que una serie de ese estilo fuera a triunfar en su emisora. Los problemas con el piloto y el casting fueron evidentes, los directivos no querían que Holly Marie Combs protagonizara la serie ya que en esa época era casi una total desconocida, por lo que Aaron tuvo que enfrentarse a ellos y convencerlos de que era la única forma de seguir adelante con la serie, además la tercera actriz en discordia Lory Rom, decidió abandonar el proyecto nada más rodar el piloto, por lo que hubo que buscar un repuesto a toda prisa llamado a Alyssa Milano, que estaba trabajando en Melrose Place, serie de la casa, y volver a filmar el primer episodio de nuevo.
Se grabaron seis capitulos, y tras la emisión del segundo TheWB le concedió una temporada completa ante los grandes ratings que había obtenido, aunque hizo una demanda, rebajar los elementos góticos de la serie, menos oscuridad y una trama procedimental que ayudara a los nuevos espectadores a engancharse a la serie en cualquier momento de la temporada.
Con el séptimo episodio la serie cambió de forma sustancial, la música de fondo y las tramas se reestructuraron y la audiencia continuó siendo fantástica, aunque los jefes de la emisora siguieron entrometiéndose en la producción, demandando un mayor protagonismo para Shannen en las tramas e intentando evitar que la presencia de Brian Krause se convirtiera en habitual.
Así y todo la primera temporada consiguió reunir a 5,4 millones de espectadores en la noche del Miércoles, ayudados por el potente Lead-in que WB les otorgó, Dawsons Creek, que marcó unos idénticos 5,4 millones y superando a Buffy (5,3 millones) por la mínima.
2ª Temporada.
Tras el éxito de la anterior tanda de episodios se decidió mudar la serie a los Jueves y dejar su exitoso hueco para el estreno de Roswell, pero Charmed siguió triunfando en su nuevo horario pese a que las cosas se complicaban fuera de los escenarios.
La salida de Ted King la temporada anterior trajo el fichaje de dos nuevos actores regulares, Karis Paige Bryant y Greg Vaughan que resultaron ser un fracaso total, siendo rechazados por los espectadores. Karis Paige fue mágicamente expulsada de la serie tras tan solo 4 episodios y Vaughan dijo adiós al final de temporada por decisión de los productores, que alegaron que no habían podido encontrar un camino para él en la serie, cosa que si hicieron para Brian Krause, que pasaba a ser regular tras haber aparecido como guest star durante un año y medio y que se encontraba inmerso en una relación sentimental con Alyssa Milano por aquella época.
La creadora de Charmed, Constante M. Burge y su co-productor ejecutivo Brad Kern comenzaron a tener serias disputas en la sala de escritores, ambos querían continuar la historia de diferentes maneras, la primera deseaba continuar con el esquema seguido hasta el momento, mientras que el segundo buscaba virar las tramas hacia un lado mucho más sentimental y potenciar las relaciones amorosas y no las tramas mágicas. Después de meses de desavenencias TheWB decidió apoyar a Kern y la creadora de la serie decidió abandonar el proyecto.
Además comenzaron a surgir problemas entre Shannen Doherty y Alyssa Milano, que había ganado una tremenda popularidad durante el descanso veraniego entre la primera y la segunda temporada, aunque la sangre de momento no llegaría al río.
Si los problemas detrás de las cámaras se sucedían, delante de ellas todo eran alegrías, Charmed se convirtió en la segunda serie más vista de su cadena con 4,8 millones de seguidores, solo superada por su “hermana mayor” 7Th Heaven.
3ª Temporada.
Tras la salida de Burge, Brad Kern comenzó a introducir elementos seriados en la producción, abandonando paulatinamente el esquema conocido como “monster of the week” y contratando a Julian McMahon (que comenzaría a salir con Shannen Doherty en la vida real durante unos meses ) como el principal interés amoroso de Alyssa Milano.
La audiencia de la premiere atrajo a los mismos 7,7 millones que siguieron el piloto, pero la trama cada vez se centraba más en los personajes de Milano y Combs mientras que Shannen disfrutaba cada vez de menos peso. La situación pronto fue insostenible, Milano y Doherty habían dejado de hablarse y el ambiente en el set era infernal, las actrices solo se comunicaban cuando sus personajes se veían obligados a hacerlo y Shannen dio un ultimátum a la cadena y a los productores, o permanecía una o la otra.
Tras tensas semanas y después de grabar el último episodio de la temporada donde los personajes de Prue y Piper quedaban seriamente heridos, Shannen decidió abandonar la serie sin previo aviso, dejando colgados a actores y productores e incumpliendo flagrantemente un contrato al que le faltaban aún dos años de vigencia.
Charmed estaba renovada por dos temporadas más y se había mantenido como el segundo mejor producto de TheWb con 4,9 millones de espectadores, superando por tercer año consecutivo a Buffy y a Dawson’s Creek.
4ª Temporada.
La prensa comenzó a asediar a Shannen, que estaba metida en un buen lio con la demanda que le habían interpuesto, arremetió contra el plantel de la serie, acusándolos de poco profesionales y declaró que si ella abandonaba la serie, su mejor amiga, Holly Marie Combs también lo haría, cosa que dejó en evidencia, una vez más, a la diva de Hollywood que se salvó de la demanda gracias a Holly, que desde el momento comenzaría a ser acreditada como la estrella de la serie a pesar de la fama de Milano.
Shannen se negó a continuar rodando ni siquiera la salida de su personaje, por lo que los productores tuvieron que ingeniárselas para continuar con el lucrativo negocio que suponía la serie. Pasaron todo el verano buscando una sustituta para Doherty, siendo los nombres de Tiffani Thiessen, Eliza Dushku, Rose McGowan y Jennifer Love Hewitt los candidatos a llevarse el gato al agua. Finalmente fue McGowan la que logró convencer a los directos y se incorporó a la serie tras firmar un acuerdo por cinco años, junto con Alyssa y Holly que prorrogaban el suyo por tres más.
La trama continuó con el esquema seriado del año anterior y tras el general y lógico paso del tiempo las audiencias comenzaron a resentirse de forma leve, aunque la mayor preocupación de la cadena había quedado saldada, y es que el personaje de Rose McGowan fue ampliamente aceptado por la audiencia, 4,2 millones de seguidores que tras la marcha de Buffy a otra emisora y el desmoronamiento de Dawson’s Creek seguían siendo más que suficientes.
Charmed había llegado al ecuador de su emisión en la parrilla americana y debía consolidar los datos registrados durante su última y crucial temporada con la incursión de una nueva actriz y el cambio en la dinámica que supuso perder a una figura que arrastraba a tanto publico como Shannen Doherty. Veremos que ocurrió en el siguiente post.