17 de diciembre de 2013

El final de Homeland como la conocemos.



Quiero ser breve, porque supongo que es la última vez que hablaré sobre la serie en el blog, la última porque creo que desde este punto dejo de prestarle atención, y porque este año no ha estado a la altura, ni muchísimo menos.

Spoilers sobre la tercera temporada de Homeland

La serie lo tenía muy difícil tras una desbaratada segunda temporada donde todo era meter más y más carbón a una caldera que ya no lo soportaba. La rapidez en la quema de las tramas puede ser un elemento trepidante en el momento pero, irremediablemente, deja al espectador en desasosiego a largo plazo, más si cabe cuando las ideas empiezan a ser cada vez más rocambolescas e imposibles.

Es cierto que ninguna serie es verosímil, porque una serie necesita entretener y la verosimilitud al 100% no funciona, pero habría que preguntarse que tanto por cien de verosimilitud se necesita para que el espectador acepte las normas del juego. Incluso en la ciencia ficción se ha de crear una cierta verosimilitud según la mitología de la serie que debe ser fiel dentro de sus propios parámetros, y creo que ese ha sido el fallo de Homeland, y por eso ha envejecido tan mal y pronto. Los excesos.



Es el Kurt Cobain de las series, y lo digo así de claro. Me parece que esta temporada ha pasado de ser desde descafeinada a un despropósito pasando por locura, vuelta a descafeinada y finalmente una contención de daños, una reagrupación que era inevitablemente lo único que se podía hacer para intentar salvar el barco y poder darle escapatoria hacia una nueva historia.

Es evidente que los guionistas han hecho lo más sensato, eliminar a Brody y sacudir los cimientos de la serie para empezar una nueva historia en la cuarta temporada. A mí que no me esperen, no me interesa, yo creo que ya he visto todo lo que tenía que ver de Homeland. No se si estaréis de acuerdo conmigo, pero la historia de Carrie no da más de sí.

Y la faceta interpretativa de Damian Lewis ha sido lo peor, de lo peor, de lo peor.


15 de diciembre de 2013

Primer balance de la temporada '13 - '14.



La primera mitad de la temporada ha acabado, llevamos más tres meses inmersos en la nueva temporada y nos encontramos en el clásico parón navideño, antesala de los estrenos de la mid-season y los finales de las series que no seguirán o con temporadas de 13 episodios. Con este recorrido ya podemos aventurar y empezar a sacar balance de los aciertos y fracasos de las parrillas de las cuatro grandes networks y TheCW. Por quinto año consecutivo, el primer balance de la temporada.



NBC se corona como la network con mejores resultados gracias al fenómeno del fútbol los domingos y al arrollador éxito de The Voice los lunes y martes. Su gran éxito en ficción es la ya renovada Blacklist con una media de 11 millones de espectadores siendo el mejor estreno del año. También es un éxito Chicago Fire gracias al lead-in del concurso musical los martes. Esas 3 jornadas hacen que la cadena se aupe a la primera posición, aunque las alegrías se les atragantan los jueves con el fracaso absoluto de la noche, donde ninguna oferta supera los 3,5 millones ni el 1,5 en los demográficos y donde la sitcom de Michael J. Fox no ha podido suplir a The Office. El miércoles y viernes no son muy diferentes. Revolution está encadenando mínimos históricos y apenas supera los 5 millones de seguidores y Law & Order SVU pasa desapercibida aunque sus datos son más positivos. Grimm oxigena un poco los viernes, que terminan con un Drácula que empezó muy fuerte pero que se ha ido desinflando mínimo tras mínimo.

NBC afronta lo que queda de temporada con la pérdida del fútbol y el estreno de toda una nueva noche dominical, además del estreno de dos series en el horario de las 10:00 P.M y la apuesta por dos nuevas sitcoms la noche del martes.



CBS queda en segunda posición, aunque primera en espectadores totales, aunque no está siendo una temporada tan fuerte como suele estar acostumbrada. Los domingos su parrilla entera está sufriendo los estragos de la veteranía y The Mentalist y The Good Wife parecen ser los próximos en decir adiós si la crítica no consigue salvar a esta última, desde luego por audiencia no será. El lunes es otro día frío, ya que la única comedia potente que les queda es How I Met Your Mother que acabará en Mayo. Ni Mom, Mike & Molly, o 2 Broke Girls siguen bien el ritmo, bordeando los dos puntos de ratings, que hace que sean viables, pero lejos de datos de hace uno o dos años. Con las otras comedias de jueves ocurre lo mismo, Two and a Half Men está marcando mínimos históricos y The Millers y The Crazy Ones también se mueven dos puntos de rating.

Los martes son un día clave con la franquicia NCIS al igual que los jueves con un Survivor incombustible y Criminal Minds. Los viernes consiguen mantener el tipo con Hawai 5.0 y Blue Bloods, aunque el gran problema al que se están enfrentando es al del decaimiento de todas sus ofertas de las 10 P.M.  Poquísimos cambios a partir de Enero con el estreno de Intelligence y poco más.



ABC lleva pasándolo mal varias temporadas. La erosión de sus apuestas de las 10 P.M es todavía más aguda que la de las demás. Betrayal y Lucky 7 han sido fracasos estrepitosos aunque Castle y sobretodo Scandal sacan la parte para una complicada hora en la que Nashville se queda a medio gas. Once Upon a Time ya no es lo que era pero mantiene registros aceptables en domingo, pero Revenge empieza a tambalearse demasiado. Dancing With The Stars ha caído en los demos estrepitosamente y todas las nuevas sitcom están suponiendo un fracaso, desde Trophy Wife pasando por Super Fun Night o The Neighbours. Solo aguantan y muy bien Modern Family y The Middle. Otro tortazo importante ha sido Agents of Shield, porque está bajando muy rápido y nadie cree en ella. Peor todavía funciona OUT in Wonderland que ha sido un fracaso mayúsculo.

A ABC se le presenta complicada el resto de la temporada, con pequeños cambios aquí y allá y el estreno de dos nuevos dramas.

FOX es la que peor lo está haciendo esta temporada, y es que aunque los domingos son su día más estable y los lunes ha conseguido asentar Sleepy Hollow, el resto de la semana cojea y muchísimo. Glee no es ni por asomo la que era, ni tampoco New Girl, que ve su audiencia reducida en gran parte, como The Mindy Project, casi invisibles los martes. The X Factor se ha configurado como un auténtico fracaso en ratings, aunque parece que rentable económicamente. No obstante han habido jueves en que se ha visto superado por la oferta de TheCW. Masterchef Junior ha sido un acierto en viernes, día que ve los irrisorios datos de una Raising Hope que llora por llegar a sindicación.


La segunda parte del año se presenta muy complicada si American Idol no consigue reflotar la audiencia, además hay varias apuestas que deben cuajar como Almost Human, el regreso de The Following o el estreno de Rake.





CW está viviendo una temporada mejor que las anteriores, con un claro giro en su apuesta comercial hacía el género juvenil de ciencia ficción que tan le bien funcionó a TheWB hace más de una década. Los lunes son su peor día con las soaps que le quedan en parrilla, siendo Beauty & The Beast la que más sufre. El estreno de The Originals ha sido todo un acierto y la incombustible Supernatural se encuentra en uno de sus mejores momentos en cuanto a audiencia. Lo mismo para Arrow y The Vampire Diaries que son actualmente sus estandartes. The Tomorrow People y Reign están en buenos niveles, pero un poco justos. Peor le va los viernes con el final de Nikita y The Carrie Diaries.

TheCW es la única network que no pierde audiencia respecto a la temporada anterior y va a hacer movimientos para reforzar los lunes, enviando allí The Tomorrow People y estrenando Star Crossed. Los miércoles estrena The 100 su nueva apuesta bomba y enviará al viernes a Hart Of Dixie en una clara declaración de intenciones. El antiguo género fetiche de la emisora ha muerto.

Con NBC dependiendo de 3 programas para ganar, una CBS con productos muy antiguos que van perdiendo terreno y unas ABC y FOX que no encuentran su camino esta temporada está más apretada que nunca.

Así estaban las cosas en las temporadas:

3 de diciembre de 2013

La pérdida del hogar.



En estado de shock. Así es como uno se queda al terminar de ver la mid-season finale de The Walking Dead. Un capitulo intenso, al menos sus últimos 25 minutos, lleno de acción, destrucción, bajas y confirmaciones.

Esta temporada he oído muchísimas críticas hacia la serie que me cuestan comprender, cabe decir que lo primero que me llama la atención es su audiencia, que arrasa en EEUU y también en España. Esta no es una serie fácil de ver, aunque si fácil de seguir, pero ya por su temática muchos espectadores deberían sentirse rechazados, pero no lo hacen. Está claro que su audiencia es mayoritariamente joven, pero su seguimiento es un fenómeno sin precedentes para el cable básico que perdura un año más.

Spoilers sobre la primera mitad de la temporada.



La confrontación final entre el gobernador y Rick iba a tener que producirse tarde o temprano y aunque quizá el punto álgido haya sido épico, hay situaciones que no me han dejado satisfecho por sus incoherencias.
                                                                                       
Creo que los creadores han tenido la necesidad de relatar las experiencias del gobernador al terminar con su antiguo campamento y eso le ha gustado a mucha gente, aunque a mi me pareció anti-climático, y quizá fuera de lugar, porque todos sabíamos ya quien era el personaje, como se las gastaba y hasta donde podía llegar. Su fanatismo y su locura le llevan al irremediable final de su muerte, eso claro, si está muerto, porque tiene más vidas que un gato y el plano de sus sesos desperdigados no nos lo han regalado. ¡Qué se le va a hacer!



El éxodo de la cárcel sí era necesario, primero porque la trama se estaba estancando allí, y segundo porque la serie necesitaba movimiento, algo nuevo, la búsqueda de otro lugar, un nuevo comienzo para la segunda mitad de la temporada que ha visto como dos grandes personajes la abandonaban, Carol y Hershel. Dos grandes bajas, sin duda, la primera quizá inexplicable, y la segunda muy dolorosa, por su final y porque el personaje funcionaba como la válvula moral y el cerebro que calmaba a los demás personajes, la voz de la experiencia que se ha apagado.

Y quizá por eso la gente sigue enganchada a la serie, a los guionistas no les duelen prendas al terminar con personajes de ese calado, y eso no lo hemos visto nunca antes en ninguna serie, en esta producción no se depende de los actores, sino del avance de la trama horizontal que es la huída, una huída casi siempre atropellada que no entiende de esperas ni de débiles.

Ahora The Walking Dead debe volverse a reinventar, dejar de lado el fantasma del Gobernador, que no da más de si y centrarse en la nueva supervivencia. Febrero queda cerca.

24 de noviembre de 2013

La redención del Doctor.


Parece casi imposible que estemos hablando de una ficción semanal que ha cumplido 50 años. Sí, con sus impasses y demás contratiempos, pero 50 años de una historia épica que, sin lugar a dudas se ha celebrado por todo lo alto.

Es imposible dar la espalda a un producto como Doctor Who, primero por el cariño y saber hacer con el que está realizado y segundo y sobretodo por la magnifica mitología construida a lo largo de 10 lustros, una mitología en la que estamos metidos de pleno, que conocemos de sobra y que hace que esta serie sea tan vibrante, eso y su coherencia dentro de ella. Algo tan difícil de conseguir que asusta.




Queda claro que le podríamos pedir muchas cosas a la serie, que no acaba de desprenderse de ese halo infantil que la tiene un poco restringida, que a veces es demasiado simple y facilona. ¿Pero no será eso al final lo que la ha hecho durar tanto tiempo? Yo, como espectador exigente a menudo me enfado con Doctor Who, pidiéndole más, sabiendo que tiene un potencial que puede explotar en mejores condiciones, pero pronto se me pasa. Al final, la serie siempre te lleva al lugar donde busca. El lugar épico donde al final, la nostalgia y el futuro se unen.

El capitulo conmemorativo del 50 aniversario funciona. ¡Cómo no iba a hacerlo! Sobretodo porque nos da a los fan actuales a los dos doctores que han redefinido la serie así como a dos de las companions más características desde su reestreno y además con una historia que si bien empieza floja adereza muy bien esa heroicidad y la comedia a la que nos tiene acostumbrados.



Tanto Hurt, como Tennant y Smith son más que solventes y se encuentran muy cómodos en el papel, y quizá ese factor ayuda al espectador a entrar en la historia sin reservas. Con un episodio con presupuesto y capaz de reformular la historia negra que ha venido acechando la mente del doctor desde tiempos inmemoriales.

Queda clara al fin la cohesión entre, ahora las 13 encarnaciones, con multitud de guiños al pasado de la serie, incluso al futuro, con la primera imagen de Peter Capaldi como nuevo doctor y la sensación de que al undécimo le quedan las horas contadas.



No quiero comentar nada más del episodio, que seguramente habréis visto, lo importante aquí era hablar de la importancia de la serie para el género de la ciencia ficción y en general del mundo televisivo como industria. Y el legado que nos va a continuar dejando esta producción transgeneracional que pide a gritos seguir siéndolo.

29 de octubre de 2013

Cary, Diane, Will, Alicia & Associates.


Y en la quinta temporada surgió.


Spoilers sobre lo que llevamos del quinto año de The Good Wife.




Que quede claro que a mi The Good Wife me gusta y me ha gustado (casi) desde el principio, a pesar de que no aporta nada nuevo y es una serie de los 90. Pensadlo bien, es una serie MUY de los 90. Y aunque eso no sea nada malo, si estoy en desacuerdo con todo aquel que dice que es una serie sin fisuras y perfectamente planteada. No. The Good Wife adolece de los mismos problemas que cualquier otra serie buena de 22 episodios, aunque, evidentemente haya que callarse los dedos ante el fabuloso episodio 5x05. Y digo eso porque para llegar a ese, se han necesitado 4 episodios allanando el terreno, y esos son muchos episodios.


Está claro que la serie cuenta con un casting de lo más atractivo, solvente y con una trama continuada que es lo que realmente merece la pena, junto a sus actores invitados y sus sutiles toques de humor. Menos interesantes son los casos procedimentales y el peaje que hay que pagar para llegar a un episodio como este 5x05. EL EPISODIO.




Y es así, es EL EPISODIO por su tensión narrativa de principio a fin, sus gestos, miradas, contraataques y todo lo que supone para una olla que llevaba calentándose durante muchos episodios pero que se ha puesto a hervir ahora arrebatadamente. Es sin duda el mejor episodio de la serie, y creo que lo es porque cambia el esquema de lo que ha venido siendo hasta ahora The Good Wife. Alicia siempre ha sido una mojigata, y su vida es velada, al igual que todas sus decisiones, aunque ahora parece que toma la sartén por el mango y está dispuesta a dar duro a todo el que se le ponga por delante.




Y ahora es cuando empieza lo interesante, o debería, con el enfrentamiento de poder entre ambos despachos, Peter, Gold, Jackie y demás parafernalia. Y Diane.


Por algo dicen que es la mejor serie en abierto ¿No?

15 de octubre de 2013

Grandes amasadores de dinero (VIII):
Series del prime-time.



Y digo yo ¿Qué sería de este blog sin mis secciones? Tengo varias y las actualizo poco, pero ahí están y me gusta. Y más cuando hablamos de dinerito.

 

Porque se han hecho públicos muchos de los precios por spot que pagan los anunciantes americanos por publicitar sus productos en determinada serie. La ganadora os la podéis imaginar, pues es The Big Bang Theory. Como hablamos de una sitcom, tan solo cuenta con 8 minutos de publicidad, ingresando 326.260 dólares cada 30 segundos, un rápido cálculo nos lleva a un beneficio de 5,2 millones por episodio, aunque también hay que tener en cuenta un acuerdo por sindicación de 2 millones por capítulo, lo que sumaría unos 7 millones de beneficio sin tener en cuenta otros factores importantes como ventas en dvd y demás.




Aun así cabe señalar que, con los tres actores protagonistas cobrando 350.000 dólares por episodio, con Kunal Nayyar y Simon Helberg en la orquilla de los 100.000$ y Mayim Bialik y Melissa Rauch en los 60.000$, casi un millón y medio irían tan solo destinados a pagar a los actores. No obstante las cifras os pueden dar una idea del negocio redondo que supone una sitcom de este calibre, incluso hoy en día.

 

Los siguientes datos son más modestos, dentro del ámbito de las comedias, Modern Family consigue 257.435$ por un spot de 30 segundos, lo que son 4,1 millones por episodio y The Simpsons, tras 25 años en antena recibe 256.963 dólares por spot por lo que es lógica su renovación, y más sabiendo que los actores de doblaje accedieron a rebajar su sueldo hace dos años para salvar la serie, algo que ocurre en poquísimas ocasiones dentro de la industria.




 De entre las nuevas sitcoms, The Crazy Ones se postula como la más cara para los anunciantes, debido al tirón de Robin Williams y Sarah Michelle Guellar con 175.200 dólares por anuncio, por delante de The Millers (122.390$), Mom (138.575$), The Goldbergs (93.200$) o la cancelada We Are Men (99.520$). NBC se conforma con 110.000 dólares por 30 segundos para The Michael J Fox Show o con los 62.370 de Welcome to the Family, lo que evidencia lo mal que está su noche de los jueves.

 

Entre los dramas cabe destacar la irrupción de Marvel’s Agents of S.H.I.E.L.D. con 169.730$ y los 139.120$ de Sleepy Hollow, lo que nos hace pensar que ni siquiera FOX confiaba en que su serie iba a despuntar como lo ha hecho. En la cola se encuentra un fracaso de NBC Ironside con sólo 71.500$ por spot y a la cabeza The Blacklist con 198.667$ cada 30 segundos.




Visto así con datos objetivos, decir que el negocio de las series en abierto en EEUU está muerto o de capa caída es toda una ridiculez, aunque evidentemente no vive sus días más dorados, tenemos mucha, pero que mucha industria televisiva por delante.

3 de octubre de 2013

Almas perdidas en busca de consuelo




El universo creado por la serie francesa Les Revenants es fascinante. Tan fascinante que incluso antes de hablaros de la serie comentaré la repercusión que está teniendo fuera de sus fronteras. La serie francesa revelación del año pasado lleva una carrera meteórica y  ha triunfado tanto en su tierra como en los demás países europeos donde se ha emitido. En Gran Bretaña lo ha hecho Channel 4 y se rumorea que quieren preparar una versión propia de la mano de Paul Abbott, ahí es nada. En Estados Unidos ha sido adquirida por Sundance Channel para emitirla este Halloween, pero ahora es la cadena por cable A&E la que se ha hecho con los derechos para un remake. Pero ¿Qué tal es la serie que está levantando tanto revuelo?



Soy consciente de que aunque es una serie que se encuentra de plena actualidad emitió sus episodios hace casi un año, 8 episodios de una hora de duración donde se nos relata la vuelta de unos seres que dejaron de existir para sus seres queridos hace tiempo, pero que vuelven como lo que eran y deben adaptarse al cambio brusco que supone retomar una vida que los había dejado atrás. No es necesario contar más, porque tu, espectador, eres el que debes decidir si te interesa la temática e ir descubriendo el porqué de la vuelta a la vida de todos estos personajes que nos consiguen atrapar por la incertidumbre a la que se ven sometidos, y en definitiva a la que todos nos hemos tenido que enfrentar en algún momento.



La estética está cuidadísima, y las actuaciones, al igual que las tramas tienen otro ritmo, opuesto al americano, quizá un soplo de aire fresco para el espectador acostumbrado a esas técnicas. Y con eso no quiero decir ni mucho menos que sea aburrida o poco trepidante. Todo lo contrario, te deja con ganas de más al terminar con cada episodio, y te deja con ganas de más al terminar su primera temporada. Un final que ya conocían los que habían visto la película en la que se basa la serie estrenada en 2004 con el mismo nombre, pero impactante para los que no la conocíamos.



La historia de The Revenants te atrapa y no te suelta hasta que visionas el último episodio, por eso la recomiendo, y por eso está tan presente en estos tiempos. Si no la queréis ver vía la serie francesa quizá el remake inglés o americano podrá acercaros este relato. Será muy difícil cargarse una historia tan bien pensada y ejecutada, o quizá demasiado fácil, el tiempo lo dirá, al igual que si estas almas consiguen lo que han venido a buscar.

30 de septiembre de 2013

Breaking Bad 5x16:
El adiós silencioso y contenido



Ya está, llegó el final de una serie que ha sido sobrevaloradísima, analizada hasta extremos imaginarios, ensalzada como la mejor de una época y elevada a los olimpos de las mejores series de la historia. Bueno, todo esto no importa, el viaje lo hemos disfrutado más o menos, con sus altos y sus bajos, pero dejadme decir una cosa, ante este final no hay nada que argumentar, un final redondo bajo los preceptos de la serie, silencioso, contenido, poético pero claro, en definitiva, un final que hace justicia al recorrido de la serie, que no mancha su trayectoria, sino que lo ensalza, sin necesidad de grandes artificios.

Spoilers a partir de este punto.



Ha sido un final que muchos imaginábamos, pero no por ello menos especial. A mi sus 55 minutos me han parecido vibrantes, no por su ritmo, sino porque se olía el final, la despedida, y ahí es donde la carga dramática impulsaba todo lo demás.

Quiero comentar algunas pinceladas, porque se hablará largo y tendido sobre el final, algo que me suele aburrir, por lo que prefiero pronunciarme ahora y no eternizarlo con más entradas. Por una parte tenemos a Walt, que por fin confiesa que lo que hizo lo hizo por si mismo, porque por primera vez se sentía necesitado, y creo que esa ha sido la aseveración más sincera de la que ha hecho partícipe a alguien en el transcurso de la serie. Walter ha sido un personaje  ninguneado por la vida, con un trabajo mediocre, un hijo discapacitado, una mujer dispersa y un intelecto que no le dejaba disfrutar de lo bueno que tenía y que le atormentaba sobremanera. Quizá por ello el personaje es tan interesante, y quizá por ello, quizá, se convertirá en un ejemplo de la ficción de los 2000 cuando se analice desde la distancia.



Que iba a morir lo sabíamos todos, que lo iba a hacer matando también, era demasiado orgulloso para abandonar el dinero que había ganado de esa forma tan sucia, aunque el dinero fuera lo último que quería. En el reconocimiento estaba la clave.

Lo que queda claro es que ante la fuerza aplastante del personaje, los demás se han quedado con una parte del pastel tan pequeña que ni siquiera es reseñable, incluso el co-protagonista, Pinkman, que escapa pero que no se enfrenta, porque da por hecho que el final ya ha llegado para su compañero y que el tiene una vida para vivir, la única válvula de escape que nos ha dejado Vince Gilligan.



Poco más que añadir acerca del episodio final, uno redondo y consecuente que pone un broche de oro a la serie de la que todo el mundo habla y a la que todo el mundo ama. Yo he sido muy crítico con ella en ciertos momentos, pero hay que darle al césar lo que es del césar. Yo he disfrutado, y mucho, con el visionado de la serie, con sus trampas y singularidades y con sus fortalezas y amarguras, y lo único que espero es que vosotros también lo hayáis hecho, que para eso está la buena televisión.


24 de septiembre de 2013

La delgada línea de la decencia.



En los años 50 el sexo seguía siendo un tabú, quizá EL TABÚ, y eso es lo que la nueva serie de Showtime viene a ofrecernos. Y su piloto convence, y mucho, algo a lo que Showtime no nos tenía acostumbrados desde hace tiempo, básicamente desde el estreno de Homeland y Shameless tres temporadas atrás.



Volvemos a tener una ficción de época, que sabemos que suele funcionar, y en ella añadimos un toque picante, pero que realmente solo sirve de premisa, porque por mucha investigación para descubrir las reacciones del cuerpo humano al practicar sexo, Masters of Sex narra el conflicto entre sus personajes, su ansias para conseguir sus objetivos, sus luces y sus sombras. Y eso es solo lo que se vislumbra en el piloto.

Su duración excesiva (61 minutos) ni aburre ni agota, es más, te deja con ganas de más, algo que cada día es más difícil en los pilotos de TV, generando además un conflicto para que los nuevos episodios enganchen en una relación doctor-asistente que seguro dará mucho que hablar.



Masters of Sex es quizá el mejor piloto que he visto este año, pero quién sabe si la nueva temporada nos sorprenderá con un gran hit que deje eclipsados a los demás, permitidme que lo dude.
Si te gustan las series adultas, sin giros de tuerca imposibles, pero argumentos sólidos, esta es tu serie. Al menos en el piloto.

2 de septiembre de 2013

Grandes fracasos de los 2000 (IV)
(FOX y CW)



Fracasos, fracasos y más fracasos en la última entrega de este especial en el que ya han sido analizados los batacazos de NBC y UPN, CBS y TheWB y ABC.

Y claro, para los postres tenía que quedarse FOX. Hoy descubriremos si es tan fiero el león como lo pintan o si la idea concebida de que la emisora cancelaba sus series a primeras de cambio estaba completamente justificada.

FOX



Fastlane (2002-2003) tenía a actores conocidos, grandes estrellas invitadas, carreras de coches, y un presupuesto que superaba los 2,5 millones de dólares por episodio, cifra bastante abultada para la época. No obstante, su bajada de espectadores y su traslado a la noche del viernes la hicieron completamente inviable, mandando a Tiffani Thiessen a varios años de letargo laboral.

Firefly (2002-2003) fue aquella serie de culto a la que todo le salió mal. FOX presionó a un Joss Whedon que estaba dando miles de alegrías a TheWB para realizar el proyecto dentro de sus estándares, cosa que enfureció al creador, que tuvo que ver como su serie se emitía sin casi promoción, con el orden de sus episodios alterados y terminando con una audiencia de 4,5 millones en su último episodio emitido, el número 11. Los críticos y fans que aplaudieron la serie intentaron que UPN, experta en Sci Fi por aquella época, la repescara, pero el mito quedó ahí para siempre, aunque años después se cerraran las tramas con una película. Digo yo que tener como protagonista al innombrable nº1 también ayudó a su fracaso ¿No?



John Doe (2002-2003) Solo 21 episodios aguantó un pre-Prison Break Dominic Purcell en parrilla sin saber quien era o porque había llegado a donde estaba en una serie con un premisa muy similar a Kyle XY que no pudo cuajar en la oferta de la FOX durante 2003. Los seguidores de la producción se quedaron helados cuando, al no ser renovada, se quedaron sin saber cual era la verdadera identidad del misterioso protagonista.

Tru Calling (2003-2005) era el estreno como protagonista de Eliza Dushku después de terminar Buffy estando acompañada de Jason Priestly en una serie adolescente donde a ella se le aparecían los muertos en el tanatorio donde trabajaba para, más tarde, dar marcha atrás en el tiempo e intentar salvar sus almas. FOX la estrenó tras The O.C y en competencia directa con la última temporada de Friends. Sus audiencias fueron bastante flojas y estuvo en la cuerda floja durante mucho tiempo hasta ser renovada por 13 episodios, orden que fue rebajada a 6 poco después. Con el paso del tiempo FOX decidió que la cancelaba tras esos episodios y que nunca emitiría esa segunda temporada. Tras ver como su parrilla no era lo competitiva que quisiera se decidió a darles salida un año después, aunque solo llegó a emitir 5 episodios, dejando la season finale en el limbo hasta que se emitió en sindicación 3 años después.



Wonderfalls (2004) narraba en clave de humor la vida de una licenciada en filosofía que tiene que vivir trabajando en una tienda de souvenirs para sobrevivir. A pesar de tener a Bryan Fuller como creador y productor ejecutivo, la serie sólo duró 13 episodios, los justos para narrar una historia coherente con principio y final, pero que supo a poco. Y es que esta mezcla de comedia y fantasía que tan bien se le da a Fuller, tampoco fue capaz de retener a la audiencia.

North Shore (2004-2005) Tras el éxito de The O.C, FOX pensó en volver a estrenar otra soap en periodo estival y continuar con su emisión en temporada alta. Esta serie protagonizada por Kristoffer Polaha no tuvo el mismo efecto que su predecesora y fue dilapidada por la crítica. En un esfuerzo por reflotar sus resultados, la cadena fichó a Shannen Doherty, si, la diva, ELLA. No surtió efecto, y su carrera cayó en picado desde entonces, totalmente injustificado.



Reunion (2005) tenía una premisa de lo más sugerente, y es que se narraban los últimos 20 años de un grupo de 6 amigos tras resultar asesinado uno de estos en el 20 aniversario de su graduación. A la crítica le gustó, pero tan solo duró 9 episodios tras decepcionar a la FOX y no conseguir retener la audiencia su importante lead-in, que fue otra vez The O.C. Tanto fue así que su último episodio emitido marcó 3,5 millones de seguidores, una cifra paupérrima para la época.

Stacked (2005-2006) era el vehiculo para mayor gloria de Pamela Anderson. Ella interpretaba a una chica tonta que termina trabajando en una pequeña librería donde todos era infinitamente más listos que ella. Por difícil que parezca, fue renovada tras los buenos datos de su corta temporada de 5 episodios, pero su segundo año empezó con muchos problemas, bajada en los ratings y 5 de sus últimos episodios que ni siquiera llegaron a emitirse.



Drive (2007) fue el juguete que Tim Minear le regaló a su amigo el innombrable nº1 como protagonista de otra de sus series que se fue al garete, aunque esta más rápida y más dolorosa. Drive iba a estar protagonizada por Ivan Sergei pero algo pasó tras su piloto y fue despedido. Aun así, la serie sólo resistió 4 episodios en parrilla y, por ello, no fue vendida fuera del circuito americano. El mayor batacazo de FOX de la época.

The Return of Jezebel James (2008) Amy Sherman-Palladino acababa de terminar su gran éxito Gilmore Girls, una serie amada por la crítica y con audiencias que fueron aumentando con el paso de los años, conscientes de esto, FOX le pidió la creación de una comedia, territorio donde tenían serias dificultades, sobre la relación de dos hermanas, es decir, la relación entre dos mujeres, algo que Amy sabe hacer y muy bien. Lo que todo el mundo esperaba era que la serie no funcionara, quizá lo que nadie esperaba fue que ni tan siquiera le gustara a la crítica o a los seguidores de la showrunner. No dio tiempo tampoco, 3 episodios y a la calle.



Terminator: The Sarah Connor Chronicles (2008-2009) No se puede hablar de fracaso absoluto, ya que se emitieron 31 episodios, pero vivió una renovación milagrosa tras su primera y corta temporada cuando FOX, a sabiendas de su fama, intentó lavar su imagen y asentar la serie. Cosa difícil cuando envías tu producto a la noche de los viernes. Ni Sarah Connor puede con eso.

Dollhouse (2009-2010) Suponía la vuelta de Joss Whedon, mucho más maduro y con una cadena que nada tenía que ver ya con la que canceló Firefly. Pero los problemas comenzaron pronto con un piloto que tuvo que rehacerse, luego con una política de duración de 47 minutos por episodio y claro, su estreno en viernes, el Black Friday, donde cualquier posibilidad de triunfar es nula. Tras 13 episodios se renovó por una 2ª temporada impensable que nadie apostó como realidad, y que se dilapidó en episodios dobles, con un capitulo nunca emitido y evitando en todo momento los sweeps de audiencia. Eliza/FOX: 0-2   Wheddon/FOX: 0-2.


CW



Los directivos de TheWB y UPN creyeron que al fusionar sus dos emisoras en CW su público crecería exponencialmente y reuniría al menos, a las audiencias acumuladas de sus dos networks siendo entonces una quinta opción potente que pudiera hacer frente a FOX. Nada más lejos de la realidad.

Y Runaway (2006-2007) fue directamente su primer batacazo contra el suelo y sin dientes. Narraba la vida de una familia que se muda a Iowa por problemas con la ley y tan solo duró 3 episodios, hasta el momento de llegar a 1,8 millones de espectadores, todo un descalabro para una cadena que aspiraba a la gloria y que vio como su primera gran apuesta no llegaba al mes de emisión.



Reaper (2008-2009) era un intento de volver a las series que triunfaron en la época de TheWB, producto adolescente con un esquema claro y conciso en el que un joven de 21 ve como sus padres vendieron su alma al diablo y este ahora deberá hacer todos sus trabajos sucios. Aunque la premisa fuera original su primera temporada de 18 episodios pasó con más pena que gloria y estuvo a punto de ser cancelada, aunque CW la salvó in extremis para tan solo 13 capítulos más

Melrose Place (2009-2010) quería heredar los datos de 90210 pero este remake no surtió efecto entre el público, sus ratings fueron bajos aunque no desastrosos y la crítica la trató moderadamente, aunque destrozó la actuación de Ashlee Simpson, que fue despedida tras el décimo episodio y aplaudió la incorporación de Amanda Woodward, o lo que es lo mismo Heather Locklear, que no pudo remontar los datos de la producción. Tras 18 capítulos y con un final semiabierto la serie dijo adiós para siempre.

La década de los 2000 fue convulsa para una FOX con poca paciencia que quería igualar en datos a las tres grandes, pero que sólo lo conseguía con producciones muy puntuales y con una CW que nacía con ansias de arrasar y juntar a los espectadores de sus respectivas emisoras pero que se pegó un batacazo del que todavía no se ha recuperado.