Crónica de una temporada descafeinada (III)

¿Cuáles han sido las claves para las producciones de cable más importantes? ¿Qué ficciones han conseguido mejorar su calidad y prestigio? Todo esto es lo que voy a intentar plasmar, a título muy personal, en esta tercera y última entrega.

Battlestar Galactica: La segunda parte de su última temporada nos dio una lección desde el primer episodio, pasando por el fallido golpe de estado hacia la destrucción de la facción rebelde cylon en uno de los mejores tramos de la historia de la TV, y aunque su final fue recibido de maneras dispares, mejora y es mucho más coherente con un nuevo visionado, una mirada al pasado para afianzar un futuro. La esperanza nunca debe perderse. Lo mejor unos guiones excelentes acompañados de unas interpretaciones que sobrepasan la altura de lo establecido, lo peor lo que la echamos de menos.

Weeds: Hablando de la cuarta temporada (que por supuesto entra dentro de la temporada ’08-’09 al emitirse en periodo estival) cabe destacar que estamos ante un cambio, una ruptura de lo establecido tres temporadas atrás que dotó de un nuevo dinamismo a la historia enriqueciéndola con nuevos personajes, y aunque es verdad que el humor negro característico de sus primeros años se va tornando poco a poco en un drama salpicado de momentos de hilaridad hay que destacar que el ritmo que se consigue durante los 13 episodios es magnífico. Lo mejor vuelve a ser la interpretación de Marie Louise Parker que eclipsa al resto del elenco, lo peor es el poco provecho que saca la trama de una actriz como Elisabeth Perkins con una historia rocambolesca alejada de la muy divertida relación con su hija en la ficción durante los dos primeros años.

True Blood: Comenzó su primera temporada de la misma forma rocambolesca que como la terminó, siendo ese el cariz que toma durante todo su recorrido, y aunque con el paso de los episodios la sensación es que va cogiendo cada vez un ritmo más trepidante la verdad es que se queda en un efectista drama sobrenatural con una extraña atmosfera que es capaz de lo mejor y de lo peor y que tiene un alto poder adictivo. Lo mejor es su singularidad y frescura mientras que lo peor son ciertas situaciones rocambolescas que hacen que nos preguntemos cómo y porqué seguimos prestándole atención.

United States Of Tara: Ha sido correcta, un tanto descafeinada, con un porcentaje de comedia muy inferior y unas tramas secundarias que no interesan. La sensación de fracaso se acentúa al saber quién está detrás del proyecto y aunque Tony Colette hace un trabajo estupendo es a veces un poco cargante, aunque claro está, no es fácil llevar a cuestas la interpretación de 5 personajes diferentes, además el atuendo que cada alter ego necesita para diferenciarse de los demás me parece innecesario en la mayoría de las ocasiones entorpeciendo la trama. Lo mejor ha sido la aparición de un cuarto alter mucho más salvaje que los demás que descoloca todo lo preconcebido, lo peor ha sido la insistente aparición de todas las personalidades asfixiando al personaje de Tara.

Dexter: La tercera es su temporada más aburrida, ya conocemos a todos los personajes y la doble moral del protagonista y la verdad es que el punto de partida era bueno y la aparición de alguien que le entienda en su forma de actuar dota al personaje de una liberación mucho mayor al poder compartir su horrible secreto, pero todo funciona de forma muy lenta, sin la tensión de anteriores temporadas y con dos tramas paralelas que no aportan absolutamente nada. Lo peor es la actuación de Jennifer Carpenter mientras que lo mejor es la irrupción del personaje de Miguel Prado aunque, con reservas.

Damages: Ha vivido un segundo año de transición, por una parte se han saldado las cuentas pendientes que quedaban en el aire y por otro ha irrumpido un nuevo caso totalmente diferente que aunque ha sido muy interesante no ha conseguido superar al de la primera temporada, pero sigue siendo una serie inteligente, llena de recursos y sorprendentes giros de trama que la convierten en imprescindible y no en un thriller más. Lo mejor ha sido el duelo interpretativo entre Close y Birne con un trabajo excelente por ambas partes y con Glenn superándose capítulo a capítulo, lo peor ha sido la resolución, y no es que haya sido mala, más bien coherente, sino que viendo el ritmo frenético de los episodios era de esperar algo más espectacular.

Kyle XY: Ha terminado en despropósito total, su interés cayó en picado tras una segunda temporada muy irregular, sobretodo en su segunda parte y la audiencia americana le dio la espalda rápidamente, pasando de ser una serie de lo más refrescante y entretenida a un tostón que no aportaba nada nuevo, aunque eso sí el final con cliffhanger incluido debería haber sido subsanado por parte de la cadena y habérsele dado un final más digno. Lo peor el personaje de Jessi y la inclasificable actuación de Jaimie Alexander, hacía años que no me encontraba ante un trabajo tan pésimo, lo mejor es que ya ha terminado.

Californication: Hank se las ha visto de todos los colores en su segunda temporada, mucho más políticamente correcta que la primera, sosa y con un guión menos trabajado, las escenas de sexo también ven reducida su presencia de forma considerable aunque suben de tono, la relación entre Hank y su mujer comienza a ser cansina y la hija es muy repelente, la presencia de Madeleine Zima es testimonial. Lo mejor es que ha conseguido incrementar en ciertas ocasiones sus situaciones cómicas, lo peor es la falta de ritmo a pesar de su duración y el devaneo de los acontecimientos que parecen no tener una relación estructurada.

Entourage: Ha vivido otra divertida temporada, su sequito es realmente gracioso, pasando por Turtle y por Johnny Drama hasta llegar al gran dúo cómico Lloyd-Ari Gold. La trama comienza con un Vincent arruinado que tras el gran fracaso de su última película debe aceptar un papel de secundario que es boicoteado por su director hasta llegar a una situación en la que Hollywood le da la espalda aunque al final la llamada de uno de los grandes directores de cine le hace volver a confiar en el sistema. Lo mejor es su liviandad, el balance de los personajes y el completo escape que proporciona durante 30 minutos, lo peor es el creciente pasotismo del personaje de Vincent que parece que no tiene sangre en las venas.

Sé que no están ni Mad Men ni Breaking Bad así que tengo pendiente sintonizar mi ordenador hacia AMC por lo que os invito a que digáis que os han parecido sus respectivas temporadas en los comentarios.

Pd: Lo de Virtuality estaba cantado, ni dos millones de espectadores en su estreno el Viernes, lo que hace uno de los peores datos históricos de FOX y el destierro absoluto de la idea que la serie vea la luz de forma regular.