Cuando HBO encontró a Showtime.

Tengo dos amigas, diferentes entre sí que me hacen pasar muy buenos ratos. Una es guapa, divertida, fresca e irreverente, la otra tiene un belleza mucho más sobria, es más inteligente y mucho más refinada, aunque pueda hablar con las dos de los temas más variopintos que pasan en la vida, hay chicas más populares, sí, pero menos interesantes.

La primera tiene problemas con sus amigas, las veo muy unidas pero cuando hablamos de sexo suele enfadarse, y es que acaba de conocer a un escritor venido a menos que la trae por la calle de la amargura y no es para menos, hay veces que creo que la pobre vive en un mundo de príncipes y princesas del S. XVI, y aunque dejo descartada la idea de que tenga doble personalidad, pienso que ve fantasmas por todas partes, está como en el espacio. Ya le tengo dicho que la hierba es muy mala y como no vea de dejarlo tendré que llamar a una conocida mía ducha en medicina, eso o contratar servicios menos ortodoxos para deshacerme de su “dealer”, un tipo muy peligroso.

La segunda también tiene problemas con sus amigas, mucho más banales, aunque a ella no se lo parezca cuando me lo cuenta en primera persona, si hablamos de sexo se apesadumbra porque tiene problemas serios con su pareja, un troglodita que parece sacado del lejano oeste, del que quiere divorciarse por que le da en la nariz que puede estar con dos o tres mujeres más a la vez, para ello está visitando a un terapeuta que le ayude a dar el paso, lo primero que le ha dicho es que escriba su testamento, y claro ya está eligiendo hasta el color del féretro y yo intento convencerla de que su problema se esfumaría con un trabajo fino de unos señores muy simpáticos que no te ponen pegas, aunque claro, ella achaca todos sus problemas a los amigotes de su marido y yo desquiciado estoy hasta por consultar la obra completa de Cicerón, que dicen que aunque tenga más de 2.000 años sigue siendo, esclarecedora.

Sin duda es mi segunda amiga la que más me hace sufrir, y es que resulta que ahora, viendo que su vida se desmoronaba ha dado un cambio radical de 360º. Ha conocido a un profesor del que dice que le da muchas satisfacciones pero que no le sale nada rentable, por eso sale con gente muy rarita por las noches y va a garitos de canciones alternativas, cosa que no solía hacer. Impropio de ella.

Como veis siempre he hablado con mis amigas de temas arriesgados, aunque cada una tenía una manera de pensar y eso era un alivio, pero ahora veo que las dos se parecen cada vez más de forma peligrosa. Y eso que, según me cuentan no se llevan nada bien.

¿Las presento?