2 de noviembre de 2015

Cuando The Walking Dead lo hace muy mal



Ser una serie de tanto éxito supone que todos tus episodios sean analizados y esperados de una forma especial. El análisis que se hace de esta serie no es el mismo al que se somete a NCIS, Bones o Castle, por poner varios ejemplos. Entonces cuando un episodio baja el listón de esa manera, hay que comentarlo.

Spoilers de los 4 primeros episodios de la temporada.


Estamos ante el ecuador de esta primera parte de la sexta tanda, y muchos han aplaudido los primeros tres episodios emitidos por AMC, sobretodo el segundo y tercero, por su intensidad y su trama acelerada y llena de acción. La verdad es que resultaron vibrantes a pesar de que, como seguro que a muchos de vosotros, nos spoilearan la presunta muerte de Glenn.

La cuestión es que nos encontramos ante el final del tercer episodio con dos grandes cliffhangers, por una parte esa escena con el personaje de Glenn siendo devorado y poniendo en duda si esas eran o no sus vísceras, y por otra parte a Rick sufriendo una emboscada zombie y con la camioneta averiada. Así de alto dejan la trama, y todos los seguidores estábamos esperando ver qué pasaba, como iban a salir del entuerto. Claro que AMC y los guionistas tenían otra idea…

El planteamiento del infame cuarto episodio no está mal. Saber por qué Morgan aborrece el hecho de matar seres humanos y conocer sus reacciones ante el ataque de los Wolves. Nos encontramos ante lo que se conoce como un bottle episode, es decir, un episodio barato de producir porque solo cuenta con dos personajes en un mismo escenario con una trama bastante simple en cuanto a complicaciones técnicas. Este es uno de tantos episodios con este formato en la serie, ya que todos sabemos que la política del canal AMC es la de gastar el menor presupuesto posible en sus producciones y supongo que ante el despliegue de los dos episodios anteriores los productores optaran por hacer este íntimo capítulo.

Supongo que lo primero que piensa el espectador es ¿He esperado una semana para esto? ¿Dónde están los personajes que dejé en una situación embarazosa? Y así es, durante el episodio de 90 minutos (algo que parece ser la norma esta temporada, al más puro estilo serie española) no hay rastro de ningún personaje que no sea Morgan y su amigo.

Morgan destructivo, Morgan pintando advertencias con la sangre de los caminantes, Morgan haciendo de discípulo del psiquiatra forense, Morgan aprendiendo a ser persona otra vez y Morgan dejando el lugar reconvertido tras ver morir a su amigo y haber aprendido todo lo bueno que en él había. Horroroso.

Así de claro, un episodio lamentable, moralista, repetitivo, sin ritmo y que cae en lo peor de las convicciones americanas del comportamiento del ser humano y la reinserción en la sociedad. Pero no solo eso, es un episodio aburrido, sin carisma y que se eterniza. Supongo que a alguien le habrá gustado y ensalzará el proceso interpretativo de los actores, la atmósfera y demás particularidades, pero a mí me ha parecido lo peor.

No digo que no vaya a seguir la serie, pero capítulos como este hacen que crea que no es necesaria una séptima temporada y que el cansancio narrativo va en aumento. Yo, como espectador, he terminado de ver este infame 6x04 horrorizado.

8 comentarios:

LoFelip dijo...

Suerte que me baje del carro hace tiempo. Capítulos de 90 min? anuncios inluidos) debe ser dura seguirla.

seriéfilo dijo...

Sí LoFelip, 90 con anuncios incluidos que son 60 minutos crudos más o menos. Pero con un episodio que me ha parecido lo más horroroso que he visto de la serie en mucho tiempo. Vulture dice que es uno de los mejores episodios de la serie. Yo no estoy deacuerdo, más bien harto cuando se trata el tema de la reinserción social y el shock post traumático de forma tan clara y moralizante.

Anónimo dijo...

Ya de por sí, hacer coincidir la curva alta del clímax con el final de un capítulo es bastante cobarde y facilón. Hay formas más elegantes de dejar la trama abierta. Pero es que se permiten esperar uno semana más para resolver la trama golpeándonos en la cara con Deus Ex Machina mezclado con una peli de kung-fu.
Y cómo haya muerto Glenn tendremos el consabido capítulo de personajes llorando por las esquinas y dándose abrazos. Insufrible, a veces no sé quién es más zombie.

seriéfilo dijo...

Me encanta eso de que a veces no se sabe quién es más zombie. Creo que das en el clavo con la afirmación y también me parece muy acertado que a una serie de estas características le pidamos que no sea facilona con esos climax finales porque al final el espectador necesita ver algo sólido y que le sorprenda.

Gracias por los comentarios.

María Florencia dijo...

Yo reconozco que me he vuelto a enganchar a la serie y que en los últimos 15 días me vi las temporadas cuatro y cinco... la sexta me está pareciendo muy flojita y no me gusta este juego de "llevamos tres capítulos sin saber si el tío está muerto"... a ver si lo arreglan con altura.
A mí el episodio de Morgan me gustó, pero está mal ubicado para mi gusto.
Un saludo, seriéfilo.

seriéfilo dijo...

Florencia: Gran diferencia de opiniones con el "episodio", pero para eso está el mundo seriéfilo. Claro que coincido que donde está ubicado es uno de sus mayores males. Si hubiera sido colocado en otro lugar de la temporada no hubiera pasado nada, o la crítica hubiera sido menor. Me parece algo esencial y que no lo comenté en la entrada.

Gracias por enriquecerla.

Nicolás Casas dijo...

Creo que este capítulo anticipa lo que vos mencionas en tu próxima entrada, la face tercera de la serie,el enemigo esta dentro de uno. Creo que por eso esta mal ubicado en la serie el capítulo pero aún así sirve de muestra de lo que vendrá.

seriéfilo dijo...

Nicolás: Tiene sentido, a posteriori claro. Quizá hubiera tenido sentido emitirlo más tarde.