8 de diciembre de 2009

Six Feet Under. Un cántico a la vida.


Six Feet Under se trata, sin lugar a dudas de una de las series más arriesgadas, comprometidas y valoradas de la década que está por terminar. Se estrenó en HBO en 2001 y finalizó su recorrido allá por 2005, cuando una nueva hornada de series se distinguían por su calidad y el deseo de hacer de la pequeña pantalla un lugar donde contar historias que valiesen la pena, pero Six Feet Under se adelantó a todas ellas.

La emisión por parte de HBO permitía al autor de la serie, Allan Ball, que era todavía laureado por American Beauty, recrearse en tópicos en los que por regla general las grandes networks no abordaban, y si lo hacían, desde luego no desde el prisma que el autor iba a utilizar. La premisa no dejaba de ser una serie familiar con un negocio en común y un desencadenante clásico en cualquier serie dramática que se precie, la muerte del patriarca, lo verdaderamente importante son las relaciones humanas, el deseo, la obligación y, sin lugar a dudas, la lucha moral interna derivada de los distintos valores en los estratos de la sociedad representada en la serie.


Nunca antes el tema de la muerte, tabú en la gran mayoría de las sociedades, se había tratado de forma tan desgarradora y a la vez cotidiana, la muerte es aquí, una rutina asfixiante, un sentimiento de liberación y un negocio casi siempre detestable.

Si por algo hay que admirar a esta producción es por el derribo de muchos de los temas tabú que nadie se había atrevido a ahondar todavía, como la homosexualidad, que aunque parezca mentira, era un campo todavía por desarrollar en el drama americano, alejando de histrionismos y dotando a la historia de una veracidad fuera de estereotipos, cruda y reconfortante; el sexo como sensación placentera y no como penalización, el deber, como una losa que va apretando más cada día junto a la responsabilidad que nos va minando en cada paso del camino.


Desde Nate, que es un bala perdida y se encuentra de repente con un mar de problemas y dudas que la vida le depara de sopetón, en una evolución que él no ha buscado hasta convertirse en un fantasma de sí mismo al verse reflejado en la figura paterna que nunca quiso ser, pasando por David, que vive una vida reprimida a la sombra de todos, siendo incapaz de tomar sus propias decisiones y llevando bajo sí, el yugo de la obligación, en contrapunto con Claire, una persona mucho más madura de lo que aparenta que se siente perdida, sin referentes, y sin una motivación vital que le empuje a realizar lo que desea, culminando en Ruth, una madre abnegada que no lo es tanto, con un punto egoísta después de tantos años de inanición emocional que no le impide confesar sus deseos aunque estos se antepongan a los de los demás.

Con unos secundarios de lujo que complementan a cada uno de los personajes de la serie, pronto Six Feet Under se convirtió en una de las series más laureadas por el público y la crítica, formó parte de la edad dorada de HBO y contribuyó sin lugar a dudas a que las producciones venideras se atreviesen con temas más arriesgados y que la construcción de los personajes fuera más rica en matices.


Nunca antes una muerte en una serie había significado tanto, y nunca antes una muerte en una serie había significado tan poco, este drama nos cuenta desde su primer minuto hasta el aliento final los avatares de una familia y los dramas y alegrías relacionados con ella, en una justa medida, 63 episodios de unos 50 minutos, una duración perfecta que hace que las tramas vayan fluyendo hacia su final de forma natural, aunque claro está hay peros, desarrollos de alguna historia un tanto flojos y episodios donde el ritmo se parte completamente, aunque eso sí, son los menos. Aunque tengo que decir que el final es, sinceramente épico y cuenta con los 6 minutos más desgarradores y emotivos que la TV nos ha dado, una alegoría espectacular que pone un broche de oro a todas las historias humanas colaterales reflejadas en la trama y a todos aquellos seres queridos que yacen a 1,82 metros bajo tierra.

Los personajes de la serie viven sus vidas rodeadas de muerte, de pesadumbre de llantos y quejas y aprenden a superar ese miedo para poder vivir, y creo que este es el definitivo mensaje que nos da la serie en última instancia, y es que lo importante es la vida, da igual como la conduzcas, aquí no hay malos ni buenos, hay decisiones, hechos, arrepentimientos y la lucha diaria contra los propios fantasmas de cada uno, y es por eso que cada uno traza su camino y la senda por la que va a conducir.

Six Feet Under es el mejor drama familiar que nos ha dado la industria, una serie rica en matices que, si aún no has visto no puedes perderte.

11 comentarios:

satrian dijo...

Estoy con la segunda temporada y estoy encantadito con ella, voy muy poquito a poco como con Los Soprano, pero la disfruto muchísimo.

OsKar108 dijo...

Una serie Excelente.

¡Saludos!

Kratos dijo...

Ocupa el puesto número 2 en mi top personal. Una auéntica obra maestra, esta la serie la tendría que ver todo el mundo.

francsi dijo...

de acuerdo en todo lo dicho.
el hecho de reivindicar hoy six feet undre tiene algo que ver con su pesimo puesto 18 en la lista de vayatele???? XD

Fhilippos dijo...

Totalmente de acuerdo con lo que has dicho. Para mí, Six Feet Under es la mejor serie de la historia de la TV. No es una serie sobre la muerte (como muchos piensan) sino sobre la vida (me encanta el título que le has puesto a la entrada).

El final fue el mejor episodio que he visto en mi vida, perfecto en todos los aspectos y con los minutos finales más emotivos de la TV.

En resumen, una serie de 10.

MFAL dijo...

Una obra de arte, siempre lo digo... y por ahora es mi número 1.

Casualmente al número 2 se está acercando peligrosamente Dexter... ¿¿¿Michael C. Hall tiene muy buen ojo para las series??? :P

Yo no creo que tenga cápítulos flojos (otra cosa es que no siempre pase lo que queremos... eso me ha pasado con SFU más de una vez); es más, como ya ha dicho Kratos en su entrada hace un tiempo: el peor capítulo de la serie es mucho mejor que cualquiera normal de cualquier otra serie (esa era la idea).

Sin lugar a dudas es una serie que nadie debería perderse. Una lección sobre la vida y la muerte.

PD: Dale la oportunidad a Doctor Who, te lo dice alguien que no confiaba nada en la serie (y lo que me ha soprendido!)

Saludos.

Alejandro A dijo...

no puedo creer que me encuentre a un episodio de terminarla toda!!!, siento un enorme temor de terminarla porque Six Feet Under es una serie que te marca, simplemente es la perfección hecha televisión, a mí ningún capítulo se me hizo lo demasiado malo para exagerar y creo que todo se dio muy fluido, aunque un pequeño bachecito sí se notó, no puedo creer que la termine ya, no quiero!!

Un telespectador más dijo...

Yo voy por la tercera temporada y la verdad que la serie es muuuy grande, y eso que todavia me queda lo mejor jeje

Saludos!

Lestat6996 dijo...

¿Qué puedo decir de la (para mí) mejor serie de la historia? Poco que añadir XD

ALEJANDRO A: Cuando ví el capítulo final la sensación de vacío que se me quedó no se me quitó en mucho tiempo.

Jaina dijo...

Excelente post que resume la esencia de esta serie. Yo tengo que empezar la cuarta temporada, y aunque en la tercera se nota cierto bajón, a intensidad dramática no le gana nadie. Por algo dicen que es un clásico.

vertigo dijo...

SFU no es una serie... es una experiencia que te marca y mucho.

Yo no he visto algo igual que ella ni que me haya impactando tanto y dudo que alguna serie lo haga.

saludos!